ENTREVISTA
Entrevista a la presidenta de anefp, Lidia Martín
Uno de los pilares del Plan Estratégico 2023-2024 de la Asociación para el Autocuidado de la Salud (anefp) consiste en impulsar entre sus asociados la transición desde una economía lineal a una circular, ¿cómo lo están llevando a cabo?
Efectivamente, la sostenibilidad es junto a la digitalización, la autorregulación y un marco normativo estable uno de los pilares del Plan Estratégico de anefp para los ejercicios 2023/24.
En relación con este pilar estratégico, anefp mantiene una colaboración continua con los agentes clave en sostenibilidad como, por ejemplo, con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD), con quien compartimos las implicaciones que las normativas nacionales y europeas pueden tener en nuestro sector. También participamos en distintos organismos referentes como es SIGRE, y participamos en diferentes grupos de trabajo, como la Comisión de Economía Circular de la CEOE o el Comité de Sostenibilidad de la Asociación Europea de la Industria de Autocuidado (AESGP).
Por lo que respecta a la actividad con nuestras compañías asociadas, promovemos el avance hacia una economía circular, fomentando que todas, independientemente de su tamaño, puedan adaptarse a esta transición, y mantenemos una línea abierta de formación continua sobre las implicaciones que conllevan los cambios legislativos que se están produciendo.
En este sentido, destacaría la creación del grupo de trabajo de Ecodiseño, que tiene como objetivo ayudar a que las compañías del sector de autocuidado pongan en el mercado envases cada vez más sostenibles, y la convocatoria de una encuesta bianual entre las compañías asociadas a anefp para poder monitorizar el avance del sector hacia la economía circular.
La organización de la Green Week Selfcare de anefp, que en noviembre celebrará su segunda edición, es también un buen ejemplo de la importancia que otorgamos a la sostenibilidad dentro de la agenda del sector de autocuidado, y que se ha convertido en un punto de encuentro entre los principales agentes involucrados en el ámbito de la sostenibilidad y un espacio en el que compartir ideas, proyectos y experiencias dentro de las compañías de autocuidado.
A partir de 2025, según se establece en el Real Decreto 1055/2022, todas las empresas deberán asumir la gestión de los residuos generados por sus envases comerciales e industriales. ¿Cómo se valora desde Anefp el trabajo que está realizando SIGRE para ofrecer una solución colectiva que permita a las compañías farmacéuticas cumplir con esta nueva obligación?
Ponemos muy en valor que SIGRE haya dado este paso hacia adelante, ya que facilita que el sector pueda continuar con el mismo SCRAP (Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor) para todos los tipos de envases. Asimismo, agradecemos que sigan considerando los envases de parafarmacia homólogos a los medicamentos de SIGRE dentro de su ámbito de aplicación.
Desde anefp canalizamos la información de SIGRE a través de su presentación en reuniones de nuestros órganos directivos y también de nuestros comités de trabajo.
En cuanto al nuevo Real Decreto 1055/2022, estamos esperando conocer el alcance que supone en el ámbito financiero la aplicación de esta norma.
A final de año SIGRE lanzará un nuevo Plan Empresarial de Prevención y Ecodiseño 2024-2028 para ayudar al sector farmacéutico a reducir el impacto ambiental de sus envases, ¿en qué medida cree que estos Planes están ayudando a las compañías a transitar hacia modelos de producción más sostenibles y circulares?
Disponer de un Plan Empresarial de Prevención (PEP) a nivel sectorial es una vía eficaz para poner en valor los esfuerzos que la industria farmacéutica viene haciendo desde hace años en materia de ecodiseño, y ayuda a dar a conocer su compromiso con el medio ambiente y a avanzar hacia una economía circular.
Disponer de unos objetivos de ecodiseño globales ayuda a que todas las empresas, independientemente de su tamaño, tengan unos objetivos claros y alcanzables hacia los que avanzar.
Cada año podemos ver que medidas de ecodiseño como la reducción del peso de los envases o la eliminación de envases superfluos y el mejor aprovechamiento de los materiales están cada vez más extendidas dentro del sector farmacéutico, lo que motiva a continuar avanzando, porque también somos conscientes de que queda un largo camino por recorrer.
El autocuidado responsable de la salud incluye todo un conjunto de prácticas que el ciudadano puede realizar para prevenir enfermedades, hacer frente a los problemas leves de salud, fomentar hábitos de vida saludable y contribuir a la sostenibilidad del sistema sanitario. ¿Cómo contribuye a este objetivo el correcto reciclado de los medicamentos?
El sector de autocuidado está convencido de que salud y sostenibilidad son dos términos que van de la mano. No podríamos entender la salud de los ciudadanos sin cuidar la salud del planeta. Por este motivo consideramos que llevar a cabo una correcta gestión de los medicamentos y productos de autocuidado al final de su vida útil es esencial para poder continuar avanzando en la innovación de soluciones para prevenir y tratar enfermedades sin afectar a la salud del planeta.
En este sentido, me gustaría poner en valor el esfuerzo que SIGRE lleva haciendo más de veinte años en la gestión y tratamiento de los residuos de medicamentos. Buena prueba de la eficacia del sistema es que con frecuencia este sistema colectivo de responsabilidad ampliada (SCRAP) de residuos de medicamentos y envases de medicamentos es puesto como ejemplo para otros sectores e incluso para otros países dentro de la EU.
